DSTAGE

¡Hola!

Seguimos la buena racha de locales que, además de hacernos disfrutar con sus creaciones, nos transmiten a través de los platos su pasión por la gastronomía.

No tengo demasiada experiencia con los restaurantes galardonados por la guía Michelin, y creedme si os digo que, aunque seguramente sirvan de buena guía, no creo que sea la tabla de los mandamientos de la comida.

Pero claro, o lo pruebas, o no sabrás si la o las estrellas son merecidas o no. 

Antes de que Dstage recibiera su segunda estrella, hice una reserva, para por fin conocer la propuesta de Diego Guerrero. Cuando los astros se pusieron a mi favor, reservé, y unos meses después , acudimos a nuestra cita.

Había leído en muchos sitios sobre el restaurante, y encontré una gran variedad de opiniones y reconozco que pensé:" ¿y si este dinero hubiera estado mejor invertido en otra cosa?"

No tardé en develar mis dudas...

Antes de empezar con la experiencia , me gustaría disculparme de antemano, por no utilizar términos técnicos u olvidar el nombre de algún ingrediente con el que no esté familiarizada. 

Dicho lo cual: entramos en DSTAGE.

Este tipo de restaurantes, sin duda, son una experiencia para los cuatro sentidos restantes, a parte del gusto. Desde que entras, te sumerges en su mundo y solo te queda dejarte llevar por los que saben, que son ellos. He pensado muchas fórmulas para hablaros de Dstage, y he llegado a la conclusión de que no quiero desvelar todo, así que os dejo algunas de las fotos, de algunos de los platos y llegar a unas cuantas conclusiones.

Aguacate asado, mole y masato

Chawanmushi de pulpo con coral de carabinero.

Raviolis de alubias de Tolosa en infusión de berza.

Salmonete en salmuera de cebolla roja fermentada.

Crispy pork bun

El solomillo del carnicero.

Maíz

Ajo morado.

Nosotras pedimos el menú corto, y la verdad es que nos quedamos bastante completas. Hay algunos platos o bocados que aquí no aparecen, por no desvelar secretos, y porque en otros casos, estropearía la experiencia propia.

De las 12 preparaciones, las cinco últimas del salado, me parecieron sencillamente espectaculares. Sabores tradicionales y auténticos que no esperas encontrar en un sitio así, o por lo menos con esos platos tan "modernos" y otros que te transportan a países "lejanos", sin haberlos visitado nunca. De los dos postres, el Maíz es algo único y el ajo morado, tiene su historia.  

Me enamoré del "chawanmushi de pulpo con coral de carabinero" y de los "raviolis de alubias de Tolosa e infusión de berza" solo puedo decir que jamás esperaría encontrar esa tradición en un plato con ese nombre.

He leído de todo sobre Dstage, y desde este pequeño rincón de la blogosfera, yo tengo que decir que a mi me ha encantado y veo más que justificado cada euro de la cuenta.

El sitio me encantó, el local, la decoración, la cocina abierta...(¿puede haber algo que me guste más que ver como funciona una cocina en directo?)

Me alucinó, que a pesar del nivel del restaurante, reinara un ambiente desenfadado y no por ello menos profesional. 

Con respecto a la sala, desde el primero hasta el último, son exquisitamente educados, amables y hacen su trabajo de manera sublime. 

Y en la cocina, que decir... pasión, trabajo y mucho esfuerzo. 

Es lo que me tiene loca con los restaurantes, (o al menos los "de verdad"), que son horas de trabajo, dando lo mejor de uno mismo, para que los comensales disfrutemos y tengamos una velada perfecta.

En definitiva, una experiencia absolutamente recomendable, incluso, aunque tengas que ahorrar un poquito para vivirla.

Enhorabuena a todo el equipo de DSTAGE, lo estáis haciendo muy bien.

Reserva cuanto antes, porque hay unos mesecitos de espera.

¡La semana que viene, volvemos con más experiencias gastronómicas!

Besitos,

               Cris.