EFÍMERO

EFÍMERO, por desgracia, haciendo gala a su nombre, duró poco. CERRADO PERMANENTEMENTE

Parecía que no iba a llegar nunca, ¡pero sí! El primer post del 2019 y desde hace un año...

Efímero es un restaurante del que todavía leo y escucho hablar muy bien. Con todos mis respetos, era algo que me creaba bastante controversia, sabiendo donde estaba y el grupo al que pertenecía. No por nada, simplemente, gastronómicamente hablando no  tiene una oferta que me resulte atractiva. 

Como la única manera de salir de dudas, es probando, el sábado pasado fuimos a desvelar la incógnita. 

De primeras, el sitio, más bonito no puede ser, aunque precisamente la decoración en este tipo de grupos es el eje central del negocio, por lo que no representaba ninguna novedad.

Nos sentamos, y posiblemente aquí venga la nota más negativa, (aunque con un margen de mejora maravilloso), el servicio estaba un poco descolocado, a nosotros por ejemplo, nos pusieron pan antes que darnos la cuenta. Pero no hay problema, es comprensible pensar que llevan muy poco tiempo abiertos, y son cosas que pasan, el rodaje es necesario.

El encargado de la sala, eso sí, hizo su labor divinamente, aconsejándonos, muy bien y adaptando nuestro propio menú degustación, individualmente. 

Y aquí viene una de la mejores cosas de EFÍMERO, la carta y las mil y una maneras de probarla. En principio está concebida para hacer un "menú degustación", con los platos que se eligen, emplatándolos de manera individual. Pero la cosa no queda ahí, en mi caso, mi acompañante y yo queríamos probar platos distintos, y para poder probar el puerro braseado, me pusieron un cuarto de ración... ¡ESTUPENDO!

Sin duda una manera fantástica, de probar un poco de todo y no tener que renunciar a ninguna creación.  ME PARECE LO MÁS.

Lo siguiente, probar la comida. Con esta fantástica fórmula, probamos gran parte de la carta.  

Como aperitivo, nos pusieron unos mejillones. Exactamente, dos a cada uno, con un poquito de aceite, ricos, muy. 

A continuación, os muestro en imágenes nuestra cena: 

Mejillones

Erizo gallego al natural.

Puerro braseado con meuniere trufada.

Volandeiras gallegas a la plancha.

Huevo 64º, consomé de garbanzos y guiso de butifarra.

Lenguado a la plancha con purrusalda de apio nabo.

Gamo a la bordalesa, cereza glaseada y shitake encurtido.

Cortante de yuzu, cortesía de la casa.

Chocolate / Maiz.

Dulces, cortesia de a casa.

La verdad es que todo tiene un nivel de producto y tratamiento del mismo, excelente. Las salsas y los fondos, son un escándalo.  En este caso el servicio iba totalmente acompasado, toda hay que decirlo. 

Sin duda una experiencia culinaria de gran altura, cargada de detalles que sin duda, marcan la diferencia.

¿Precio? Calidad/precio absolutamente fantástica. No creo que dure mucho, si quieren que sea rentable. Nosotros, con botella de vino, salimos a 53€ por persona.

Pero la guinda del pastel, fue la visita del chef, Joaquin Serrano. Un chico de 27 años, al frente de la maravillosa cocina de este proyecto, finalista al mejor cocinero revelación en la última edición de Madrid Fusión, con una timidez tan inusual en este mundo, que solo pudo enternecerme y pensar, que hay esperanza en el futuro gastronómico de Madrid. 

Calidad, estética, sabor y mucha HONESTIDAD, son sin duda sus señas de identidad, que en mi opinión, hacen de Efímero una visita obligada. 

C/ Marqués de la Ensenada, 16.
TLF: 91 088 75 10