Kitchen 154
¡Hola!
Hoy os tengo que confesar algo... ¡¡Estoy enamorada!!
Me emociona y apasiona que todavía, con el nivel de postureo que hay en la gastronomía últimamente, haya sitios que no se fijen tanto en la estética, pero si en la comida y encima a un precio... que casi diría que es de risa (por lo menos en Madrid).
Hoy os tengo que confesar algo... ¡¡Estoy enamorada!!
Me emociona y apasiona que todavía, con el nivel de postureo que hay en la gastronomía últimamente, haya sitios que no se fijen tanto en la estética, pero si en la comida y encima a un precio... que casi diría que es de risa (por lo menos en Madrid).
El Mercado de Vallehermoso, ese gran desconocido (y que siga así por muchos años).
Reconozco que he tardado en ir, aunque ya no lo voy a soltar nunca. Me pilla en mi radio habitual y sin duda, he quedado flechada.
Para inaugurar, elegí Kitchen 154. Me sonaba el nombre, pero claramente no está entre los sitios más instagrameados, taggeados y/o twitteados por "influencers" y cuentas con muchos seguidores. (Hay que ver la cantidad de términos nuevos que han surgido en los últimos tiempos, mientras escribo tengo media pantalla subrayado en rojo...)
Lo que iba diciendo, no es un sitio "de moda" y oye, a Dios gracias, porque este hecho, no impide que esté lleno siempre. Por algo será.
Lo primero de todo decir, que es un mercado, pero no tipo San Miguel, donde lo ponen todo muy mono, muy armónico, y te ponen típicas cosas para turista, no... Si digo que es un mercado es un mercado, de toda la vida, con puestos de siempre. Y curiosamente, en este entorno, fuera de la zona de postureo gastronómico por excelencia, se está creando un espacio donde comer demasiado bien...
En Kitchen 154 se enorgullecen de ser una tasca, por lo que no es difícil intuir que no vas a comer en un sitio "chic", así que, si eso te importa mucho... este no es ni tu sitio, ni tu post.
A pesar de que era el puente de San José, estaba lleno.
Ellos mismos dicen: "Cada día creamos una gastronomía accesible para todos, dicertida, compleja en sabores y de alta calidad". Suscribo cada palabra.
Era la primera vez que íbamos, y puesto que no estamos acostumbrados a este tipo de comida, pedimos un poco por lo que habíamos leído y por lo que creíamos que nos gustaría.
Sin duda, tenemos que volver a probar el resto.
Era la primera vez que íbamos, y puesto que no estamos acostumbrados a este tipo de comida, pedimos un poco por lo que habíamos leído y por lo que creíamos que nos gustaría.
Sin duda, tenemos que volver a probar el resto.
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| Chana masala |
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| Costillas Korean BBQ |
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| El curry thai de gambones |
La experiencia superó nuestras expectativas. Todo estaba delicioso, con un punto picante increíble. No creáis que me apasiona lo picante, pero creedme si os digo, que no quería dejar de tomar, por ejemplo, su maravilloso chana masala, que tiene un punto "importante" de picor.
Gastronomías de aquí y de allá, un viaje en toda regla por el mundo con lo mejor de cada casa, o al menos, los platos que preparan son estupendos.
Me encantan las cocinas abiertas y alrededor de la barra, porque se te pega esa pasión por la cocina, por el producto, por el trabajo bien hecho, acompañado, aunque a veces parezca mentira, de buen rollo, música motivadora (sí, se que este punto a muchos no les gustará) y gente entregada a su trabajo y al cliente.
A mi todo eso se me contagia nada más llegar a un sitio así, y en Kitchen 154 no podía ser de otra forma. Me encantan los sitios donde la cocina sabe lo que hace y le gusta lo que hace, pese a los horarios infernales y la presión adherida al puesto.
Me encanta, me enamora y no he podido evitar caer rendida a sus pies. Me encantan los negocios de restauración, que son rentables (porque sino tienen que cerrar, lógicamente), pero que no es lo que prima.
Cada día me ponen más nerviosa los restaurantes y/o bares, bonitos, donde no se come nada decente. Sitios en mi opinión, para dar una imagen o incluso, ligar. Antes se hacía en las discotecas y ahora está de moda hacerlo en restaurantes. Locales que son sólo máquinas de posteureo y de hacer dinero.
Como ya he dicho muchas veces antes, me apasiona el mundo, siento un respeto profundo por los trabajadores del sector, ya sea en cocina, en sala o donde quiera que estén. Por eso mismo, me encanta destacar el buen trabajo y el esfuerzo de los que lo hacen tan bien.
Volviendo a Kitchen, (que si empiezo con el temita, no hay quien me calle), por si no fuera poco, el precio, en mi opinión, es casi irrisorio. De verdad que podrían inflarlos un poco y seguirían llenando. Merece muchísimo la pena.
Si os apasiona la gastronomía de países orientales, de México, Perú... reservad ya e id mañana mismo.
Gastronomías de aquí y de allá, un viaje en toda regla por el mundo con lo mejor de cada casa, o al menos, los platos que preparan son estupendos.
Me encantan las cocinas abiertas y alrededor de la barra, porque se te pega esa pasión por la cocina, por el producto, por el trabajo bien hecho, acompañado, aunque a veces parezca mentira, de buen rollo, música motivadora (sí, se que este punto a muchos no les gustará) y gente entregada a su trabajo y al cliente.
A mi todo eso se me contagia nada más llegar a un sitio así, y en Kitchen 154 no podía ser de otra forma. Me encantan los sitios donde la cocina sabe lo que hace y le gusta lo que hace, pese a los horarios infernales y la presión adherida al puesto.
Me encanta, me enamora y no he podido evitar caer rendida a sus pies. Me encantan los negocios de restauración, que son rentables (porque sino tienen que cerrar, lógicamente), pero que no es lo que prima.
Cada día me ponen más nerviosa los restaurantes y/o bares, bonitos, donde no se come nada decente. Sitios en mi opinión, para dar una imagen o incluso, ligar. Antes se hacía en las discotecas y ahora está de moda hacerlo en restaurantes. Locales que son sólo máquinas de posteureo y de hacer dinero.
Como ya he dicho muchas veces antes, me apasiona el mundo, siento un respeto profundo por los trabajadores del sector, ya sea en cocina, en sala o donde quiera que estén. Por eso mismo, me encanta destacar el buen trabajo y el esfuerzo de los que lo hacen tan bien.
Volviendo a Kitchen, (que si empiezo con el temita, no hay quien me calle), por si no fuera poco, el precio, en mi opinión, es casi irrisorio. De verdad que podrían inflarlos un poco y seguirían llenando. Merece muchísimo la pena.
Si os apasiona la gastronomía de países orientales, de México, Perú... reservad ya e id mañana mismo.
Recomendadísimo, de verdad. Calidad precio imbatible.
Está en el Mercado de Vallehermoso, en el 36 de la calle que le da nombre y hacen reservas online a través de su web: Kitchen 154
¡Ay! otra cosa, si un día te pasas por allí y resulta que no hay mesa, tienen take away, además te facilitan su lista de Spoti, para que te montes en casa un "casi Kitchen154" ¡Ya me contaréis!
Un besito,
Cris.
Está en el Mercado de Vallehermoso, en el 36 de la calle que le da nombre y hacen reservas online a través de su web: Kitchen 154
¡Ay! otra cosa, si un día te pasas por allí y resulta que no hay mesa, tienen take away, además te facilitan su lista de Spoti, para que te montes en casa un "casi Kitchen154" ¡Ya me contaréis!
Un besito,
Cris.
He estado un par de veces en el Mercado de Vallehermoso pero nunca he parado en este kiosko... qué pintón! Iré expresamente!!
ResponderEliminarTienes que ir... Con lo que te gusta el picante!
EliminarGracias Cristina! La próxima te plantamos en la barra para que sufráis estar en primera fila!
ResponderEliminarMe alegro de que os haya gustado! ¡Para la próxima no me pierdo esa barra tan maravillosa! :)
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